Sin duda, un buen diseño interior debe ser compatible con un buen diseño de iluminación, garantizando que la cantidad y la potencia de las lámparas sean las adecuadas para los entornos según sus dimensiones y su uso. Los baños, en específico, deben recibir especial atención.
Además de detenerse en los tipos de lámparas y ampolletas –ya que es un área húmeda–, también se debe abordar el problema de su doble función. En primer lugar es un espacio de trabajo, donde realizamos la mayoría de nuestras rutinas de higiene personal, incluido el maquillaje y el afeitado. Estas actividades que requieren una iluminación más blanca, directa y enfocada. Pero también es un espacio de relajación, ya que es posible convertir el ritual del baño en un verdadero spa en casa. En estos casos, se recomienda incluir un circuito separado para una iluminación más cálida, con lámparas de tono amarillento, ubicadas estratégicamente para iluminar el espacio de forma indirecta.
Al diseñar un baño, recomendamos definir el diseño del espacio y el proyecto lumínico antes de distribuir las luminarias, y comenzar ubicando la iluminación directa y general, para luego planificar los efectos indirectos y específicos. En el área de la ducha, se deben elegir lámparas selladas y resistentes al vapor. Se recomienda utilizar ampolletas o bombillas tipo PAR20 con grado de protección IP65 (anti polvo, soportando chorros de agua de baja potencia) y spot direccionable, para evitar la aparición de sombras. Además, es preferible evitar la incorporación de lámparas sobre el inodoro.
Sobre algunos tipos de luminarias:
1. Colgantes
Son ideales para la iluminación indirecta y agregan un alto valor estético al espacio. En baños públicos –por ejemplo, en restaurantes o teatros–, es posible invertir en lámparas colgantes más sofisticadas: el tradicional candelabro.
Las lámparas colgantes son versátiles porque pueden entregar una multitud de efectos de luz indirectos, dependiendo de su distancia y su ubicación.
3. Focos empotrados
Es la forma más común de iluminación general en baños porque es discreta y muy funcional.
4. 'Líneas de luz' embutidas
Solución muy contemporánea, ideal para ambientes minimalistas. Son perfiles LED embutidos, que ocultan y protegen la lámpara del vapor y el polvo.
Es importante realizar diseños específicos para cada proyecto, pero en la mayoría de los casos se recomiendan:
- Ampolletas o bombillas de temperatura de color de entre 3,000K y 4,000K.
- Para calcular el nivel de emitancia luminosa, considerar 200 lux para iluminación general y 500 lux para el espacio de trabajo.
- Ampolletas con índice de reproducción cromática (IRC) superior al 80%.
Revisemos algunos aliados de la iluminación artificial en baños:
1. Iluminación Natural: Puede ingresar al espacio a través de ventanas, tragaluces o paneles vidriados. Contribuye a la higiene sanitaria del espacio, evitando olores y el surgimiento de moho.
2. Colores claros: Si es posible, se recomienda elegir colores claros en al menos una de las superficies del baño (piso, pared o techo). Favorecerán tanto la iluminación natural como la artificial. Si se prefieren tonos más oscuros, es necesario elegir lámparas más potentes, para no restar claridad al ambiente.
3. Espejos: Además de ser útiles en la rutina de higiene, los espejos amplían los ambientes y, consecutivamente, la sensación de claridad al interior de los espacios. La mayoría de las veces, es posible incrustar la iluminación en los espejos, entregando una iluminación indirecta, acogedora y sofisticada. En estos casos se recomienda la luz LED; son prácticas de instalar y muy económicos.
Referencias
- Decorfacil.com/iluminacao-para-banheiro. Acesso 09 setembro 2019.
- Vivadecora.com.br/pro/iluminacao/iluminacao-ideal-para-banheiro. Acesso 09 setembro 2019.